EL JOCKER 

Sonrisa de oreja a oreja garantizada.

1.- Pega dos papeles, formando una línea recta:

2.- Coge un tercer papel, dóblalo en dos, teniendo presente que la tira de engomado ha de dar al exterior:

3.- Humedece el papel que quedo del lado de fuera en el paso 2, y mételo en medio de los papelillos del paso 1:

4.- Esto requiere cierta práctica. Antes de que se seque el engomado tira hacia afuera del papel.  Con esto deberías dejar parte del pegamento para poder unir los dos papeles.

5.- Pega un cuarto papel en la parte inferior del borde de la derecha del papelillo:

6.- Ahora debemos añadir un papel más al final, tal como muestra la imagen:

7.- Creamos ahora una forma más triangular, doblando o rasgando el cuarto papelillo en diagonal

8.- Líalo normal, pero usa la totalidad de los dedos al liarlo (ten paciencia, que es de un tamaño “extra”:

9.- ¡A disfrutar!

LA HÉLICE O EL CRUCIFIJO

Todo depende de si eres ateo o creyente..

1.- Hacemos un “tubo”con una papelillo o dos:

2.-  Cortamos dos orificios circulares a ambos lados (con una separación  del final del “tubo” de unos 3 cm):

3.- Hacemos un segundo tubo, de la mitad de largo que el primero y con la estrechez suficiente para que pase por los agujeros realizados en el tubo de la parte 1:

4.-  Creamos dos agujeros en este tubo también:

5.- Ahora con delicadeza tenemos que unir los dos “tubos”, cruzándolos por los agujeros creados. Gira el tubo pequeño hasta que su agujero esté en línea con el agujero del tubo grande. Puedes ver la posición a través de los tubos:

6.- Con cuidado sellamos los orificios con tiras de engomado (debes sacarlas de los papelillos). Hay que hacerlo hermético.

7.-  Ahora le añadimos tres porros ya liados y con su mezcla “mágica” en los tres extremos cortos:

8.- ¡A disfrutarlo!

EL DIAMANTE:

Si hemos llegado a dominar la técnica de unir los papelillos, se nos abre un nuevo mundo de posibilidades de creación:

1.-  Hacemos un porro gordo y si puede ser con papel de L mejor, después de rellenarlo con el material “mágico”, cogemos un cutter (mejor que una tijera, ya que hace el corte más limpio)

2.- Ahora montamos otros dos porros, normales, no tan gordos como el del paso 1. Ponemos la mezcla “mágica” dejando bastante menos por el centro, para que nos permita doblar el porro.

3.-  Ahora con cuidado, recortamos cualquier exceso  de papel de los cuatro porros realizados:

4.- Cortamos diez tiras de engomado de  otros papelillos:

5.- Ahora llega lo difícil, hay que unir una de las partes del porro que partimos en el paso 1, con los dos porros del paso 2 y usamos las tiras de engomado para unirlos:

6.- Ahora con suavidad, doblamos por el centro para formar la siguiente figura:

7.-  Ahora solo nos queda juntar la figura realizada con la otra mitad del porro de la parte 1:

8.- ¡A disfrutar!

EL MOLINO

Esta construcción  vale para usarlo cuantas veces quieras:

1.-  Necesitamos papel de cartulina de 10 cm x 10 cm y lo enrollamos en forma de cono. Lo pegamos con cinta adhesiva:

2.- Envolvemos el cono con dos papelillos (o los necesarios). Deja 3cm de más en la boca más ancha del cono:

3.- Ahora con cuidado, hacemos cuatro cortes transversales que se crucen:

4.- Hacemos un “dos papeles” o usamos un papel de L para hacer un “tubo” (hemos de hacer dos tubos):

5.- Ahora cortamos unos segmentos en los dos tubos que hemos realizado en el paso anterior:

6.- Ahora insertamos los dos tubos del  paso 5 de manera que los recortes queden totalmente dentro del cono. Sellamos con tiras de engomado:

7.-  Sellamos la boca más ancha del cono y colocamos los porros con su mezcla “mágica” en los 4 segmentos que han quedado fuera:

8.- A disfrutarlo:

EL PURO DE CANNABIS

Este es difícil de hacer, más que nada por la dificultad de los “ingredientes”:

1.- Necesitamos un palo fino, puedes usar los palillos chinos (por ejemplo), cubre con aceite de marihuana, y pega alrededor de él la marihuana picada, y vuelve a recubrirlo con aceite de marihuana:

2.- Envolvemos el palo recubriéndolo con pequeñas hojas de la planta:

3.-  Embadurnamos las hojas con el aceite de marihuana, para asegurarlo, y lo envolvemos con un hilo, deja el puro secar en un lugar oscuro, seco y caluroso durante dos o tres días.:

4.- Una vez pasados esos días, quitamos el hilo y volvemos a repetir todo el proceso, pero esta vez utilizando hojas de cannabis más grandes:

5.- Añade otra capa de resina para pegar las hojas, y vuelve a asegurarlo con hojas:

6.- Deja el puro acabado en un lugar seco y oscuro durante tres semanas, después con cuidado retiras el hilo, y el palito, creando así un tubo de fumar, guarda el puro o los puros en algún recipiente hermético para almacenarlos.

7.- ¡A disfrutarlo!

Fuente: http://www.weedfarmer.com/joint_rolling/ 

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